La niña tímida

La niña tímida
La niña tímida
La niña tímida
La niña tímida

Sentada sobre las rodillas de su abuelo, la niña tímida jugaba con un globo.

Primero lo apretaba delicadamente entre sus manos y después le daba movimiento, como si se tratara de un pájaro amigo que todo el tiempo quisiera jugar con ella.

Pero de repente me vio y se quedó sorprendida. Se dio cuenta de que me acercaba a tomarle una fotografía y pensó que lo mejor que podía hacer era protegerse, escondiendo su cara detrás de su globo-amigo.

El abuelo sonreía. Me invitó a acercarme y me autorizó a fotografiar a su nieta.

El globo era blanco y, afortunadamente para mí, pareció comprender que yo no tenía intención de molestar a su amiga.

Le pedí al mecanismo de enfoque de la cámara que la buscara detrás de la esfera blanca.

Y en el visor, espléndida de inocencia y timidez, apareció su cara.

Pepe Navarro